De entre los datos que recoge el Ministerio de Vivienda los registrados durante el primer trimestre del año representan el menor número de transaciones de los que se tiene constancia.Con una caída de un 34% con respecto al mismo periodo del año anterior, las poco más de 104.000 transaciones representan el menor valor registrado desde que se empezarán a elaborar y ofrecer estas estadísticas.
Este dato refleja el mal momento que atraviese el sector de la construcción y en concreto la compraventa de vivienda tanto nueva como usada. El reajuste de precios ha provocado una total desconfianza por parte del usuario, que a estas alturas desconoce el precio real de una vivienda.
Si unimos esta desconfianza a las previsiones oficiales que indican que aún seguirá bajando el precio de los pisos, imaginamos que son muy pocas las familias que se animan a adquirir su nueva vivienda, y únicamente causas de fuerza mayor provocarían que nos uniésemos a este mercado en época de vacas flacas.
Los jóvenes aún siguen esperando viviendas a precio reducidos, y es que de momento lo que único que ha menguado ha sido su tamaño, por lo que muchos jóvenes han meditado tomar algún producto como el Reductil para adelgazar y poder entrar en estas viviendas de escasos 30 m2.
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